Sra. Alcaldesa:
Coincido con usted en la necesidad de máxima austeridad en las fiestas del Cristo debido a la “malísima” situación del Ayuntamiento y por ende del municipio. No podría ser menos cuando la inmensa mayoría de gineteros, como los españoles, estamos pagando los platos rotos de unas políticas al servicio de los poderosos y que sigue Usted al pié de la letra al poner como máxima prioridad el pago a terceros, por delante de los propios trabajadores municipales que al día de hoy aún no han cobrado.
Hace Usted muy bien en pagar facturas pendientes que se arrastran desde 2009, pero desde entonces hasta hoy han pasado 5 años y de la deuda me responsabilizo de lo que me corresponde porque parte son deudas suyas y de sus socios que para tanto quejarse de que no tienen no parece que hayan dejado de gastar.
Quizá deba saber que la prioridad de sus socios siempre ha estado muy clara. Y es que el primer acto formal de su antecesor, tan solo diez días después de tomar posesión como Alcalde, no fue nombrarla a Usted Primera Teniente de Alcalde, sino solicitar un informe a la Diputación para fijar SUS RETRIBUCIONES, y aunque no la tiene a Usted en cuenta, como terminaron cobrando los cuatro, el Pueblo imagina que tan mal, tan mal la situación no estaba.
Es verdad que, aunque los Ayuntamientos nunca han estado boyantes, pocos podrían imaginar en 2008 que una fotovoltaica renunciase cuatro años después a la instalación y hubiera que devolver lo cobrado y gastado.
Lo cobrado son recursos del Ayuntamiento y lo gastado son servicios para el Pueblo. Quizá Usted les prevea mejor destino como pagar las facturas de abogados que “negocian” traslados de granjas y tienen el detalle de hacerle al Pueblo un “barato” de más de 6.000 Euros, Ya que tan bien negocia ¿cómo no se llegó a un acuerdo con la fotovoltaica e impedir un juicio en el que el abogado se limitó a presentar un escrito de allanamiento? Para darles la razón no había necesidad de hacerlo en juicio. O sí, si de lo que se trata es de pagar a abogados.
No tiene explicación tampoco que el otro juicio, el de responsabilidad patrimonial, haya terminado en condena, cuando fue el propio Ayuntamiento, concretamente su predecesor en el cargo, D. José Paulino, el que denunció ante la fiscalía el asunto y está pendiente de resolverse la investigación penal. Entérese bien de este tema porque no cuadra que se tenga que indemnizar a alguien por algo por lo que se le ha denunciado.
Tampoco puedo pasar por alto el que se atreva Usted a responsabilizar a una vecina de este pueblo como parte de la causa de la quiebra a la que Usted y sus socios nos está llevando. Si su prioridad es pagar los servicios de terceros no debería ser un problema pagarle a ella las facturas que su socio le negó y obligarla a ir a juicio, si no es para seguir pagando abogados.
El equilibrio de los ingresos y gastos no debe servirle a Usted de excusa para claudicar. Todos pensamos que siendo arquitecta, controla la aritmética y el equilibrio. La pericia del gobernante está en obtener recursos de las piedras si es preciso. Como Alcaldesa el Pueblo espera que gobierne no que se rinda y nos arrastre en el desastre.
ANTONIO BELMONTE MORAGA